![Seguridad de la vacuna CampVac® SG9R: evaluación del riesgo de reversión de la virulencia | Biocamp Seguridad de la vacuna CampVac® SG9R: evaluación del riesgo de reversión de la virulencia](https://biocamp.com.br/wp-content/uploads/2023/10/4003-10_1-150x150.jpg)
Seguridad de la vacuna CampVac® SG9R: evaluación del riesgo de reversión de la virulencia
24/10/2023![Relación entre la calidad intestinal y la pododermatitis | Biocamp Relación entre la calidad intestinal y la pododermatitis](https://biocamp.com.br/wp-content/uploads/2023/12/1-150x150.png)
Relación entre la calidad intestinal y la pododermatitis
19/12/2023Antes de comenzar…
La evolución de las aves es un tema fascinante en biología. Según las pruebas fósiles, las aves evolucionaron a partir de un grupo de dinosaurios en el período Jurásico, hace entre 150 y 200 millones de años. Incluso después de la extinción de los dinosaurios, las aves continuaron evolucionando. Su capacidad de adaptación a diversos entornos ecológicos ha permitido que hoy en día las aves constituyan un grupo diverso y exitoso de vertebrados, con más de 10,000 especies reconocidas en todo el planeta.
En este largo camino de millones de años, algunos hechos son comunes a todas las especies: siempre han necesitado cuidados parentales y han heredado la microbiota de sus progenitores a través del huevo y las heces dejadas en los nidos. Sin embargo, en la moderna industria avícola, donde se producen miles de millones de aves y huevos anualmente para el consumo humano, las aves no solo nacen, sino que también se crían completamente aisladas de sus madres por diversas razones, entre ellas, motivos técnico-económicos y sanitarios.
Período perinatal: entre el picoteo de la membrana interna de la cáscara del huevo hasta los primeros días de vida
En la producción avícola industrial, sin ningún contacto físico con sus progenitores, el pollito recién eclosionado no hereda su carga de microbiota protectora en su tracto gastrointestinal (TG), mucosas y piel. Esto lo convierte en un blanco más fácil para las infecciones causadas por microorganismos oportunistas o patógenos, especialmente a través de las vías umbilical, digestiva y respiratoria. Precisamente por esta razón, en los últimos 60 años, la industria avícola ha recurrido a los antimicrobianos (AMC), utilizados de manera extensiva tanto de forma preventiva como curativa, para abordar y controlar estos y otros desafíos y enfermedades.
Salud única y era post-antibiótico en la producción animal
El concepto de “Salud Única” constituye un enfoque interdisciplinario desarrollado por una alianza cuatripartita de organismos internacionales: FAO, OMS, OMSA, ONU, que reconoce la interconexión entre la salud humana, la salud animal y la salud del ecosistema. Esta perspectiva fue diseñada para abordar cuestiones de salud de manera integral, teniendo en cuenta el impacto de las enfermedades en humanos, animales y el medio ambiente.
El uso de antimicrobianos (AMC) en la producción animal ha llevado cada vez más a la aparición de bacterias resistentes, representando un riesgo significativo para la salud humana. Estas preocupaciones han llevado a la promulgación de leyes por parte de las autoridades en diferentes países, limitando el uso de AMC en animales y fomentando la necesidad de que la industria avícola encuentre estrategias alternativas para el control y tratamiento de infecciones bacterianas.
Sin lugar a dudas, la colonización temprana del tracto gastrointestinal de las aves es una de las estrategias que ofrece un mejor retorno económico de la inversión.
Princípio de Nurmi
El concepto de “Salud Única” constituye un enfoque interdisciplinario desarrollado por una alianza cuatripartita de organismos internacionales: FAO, OMS, OMSA, ONU, que reconoce la interconexión entre la salud humana, la salud animal y la salud del ecosistema. Esta perspectiva fue diseñada para abordar cuestiones de salud de manera integral, teniendo en cuenta el impacto de las enfermedades en humanos, animales y el medio ambiente.
El uso de antimicrobianos (AMC) en la producción animal ha llevado cada vez más a la aparición de bacterias resistentes, representando un riesgo significativo para la salud humana. Estas preocupaciones han llevado a la promulgación de leyes por parte de las autoridades en diferentes países, limitando el uso de AMC en animales y fomentando la necesidad de que la industria avícola encuentre estrategias alternativas para el control y tratamiento de infecciones bacterianas.
Sin lugar a dudas, la colonización temprana del tracto gastrointestinal de las aves es una de las estrategias que ofrece un mejor retorno económico de la inversión.
- Administración de cultivos probióticos (NAGF, DFM): Incluye la introducción de cultivos de bacterias beneficiosas (probióticos) en la dieta de las aves, promoviendo el crecimiento de estas bacterias en los TG.
- Uso de ingredientes en el alimento que estimulan el crecimiento de bacterias beneficiosas, como ácidos orgánicos, prebióticos (FOS, MOS), aceites esenciales, extractos de plantas.
- Reducir el uso de antimicrobianos, especialmente de forma preventiva, ya que estos fármacos, utilizados de forma periódica o continuada, afectan negativamente a la microbiota intestinal, promoviendo la disbiosis, además de favorecer el desarrollo de bacterias resistentes.
- Bioseguridad y buenas prácticas de manipulación e higiene: principios y procesos fundamentales para reducir el riesgo de infecciones.
¿Por qué modular la microbiota en la planta de incubación?
Cada vez más, la investigación y los ensayos de campo demuestran que la microbiota del TG desempeña un papel fundamental, no sólo en este sistema, sino también en los sistemas inmunitario, respiratorio, nervioso e integumentario, lo que se traduce en importantes beneficios en términos de nutrición, metabolismo, fisiología, inmunidad, salud y bienestar. Esta compleja comunidad de microorganismos, formada predominantemente por bacterias, evoluciona, se desarrolla, se adapta y coloniza el intestino de las aves, desempeñando un papel fundamental en el mantenimiento de la integridad intestinal. Sus efectos sobre el TG se traducen en:
Sin embargo, la microbiota no permanece estática. Incluso antes de que nazca el pollito, ya está presente, pero todavía se encuentra en una fase rudimentaria, y a lo largo del ciclo de vida de las aves, distintos factores ambientales influyen en su composición y equilibrio. Las bacterias beneficiosas compiten constantemente con las que podrían suponer una amenaza para la integridad intestinal. El término clave aquí es “equilibrio”, o eubiosis.
Las bacterias potencialmente patógenas pueden estar asociadas a las aves reproductoras, el proceso de incubación de los huevos, la cama de las aves, las instalaciones de cría, los alimentos y el agua. Estos factores, combinados con una microbiota intestinal rudimentaria al nacer, hacen que los pollitos sean extremadamente vulnerables a la infección por bacterias patógenas durante los primeros días de vida. Por lo tanto, la colonización intestinal temprana desempeña un papel crucial en el desarrollo inicial de las aves en el llamado periodo perinatal.
La aplicación de probióticos con múltiples cepas lácticas o de exclusión competitiva al nacer contribuye a la formación de una microbiota beneficiosa y refuerza la protección frente a las bacterias patógenas. Sin embargo, para garantizar la eficacia del producto, es esencial aplicarlo correctamente.
Cómo aplicar eficazmente los probióticos en la planta de incubación
Actualmente, existen dos formas de llevar a cabo la colonización temprana de las aves: aplicando el probiótico en el interior del huevo entre los días 18 y 19 de incubación o mediante pulverización inmediatamente después de la eclosión.
El proceso de vacunación in ovo normalmente tiene lugar durante el traslado de los huevos de la incubadora a la nacedora. Existen varios tipos y modelos de equipos de vacunación in ovo en el mercado. En la práctica, todos perforan la cáscara del huevo para introducir la solución vacunal, y en algunos casos es posible añadir nutrientes y probióticos.
Un punto crítico a tener en cuenta es el momento de la aplicación. Como la colonización por el probiótico es un proceso entérico, el pollito debe ingerir el producto a través del líquido amniótico y/o de la albúmina, y en cantidad suficiente. Esto sólo ocurre cuando la aplicación se realiza entre los 18 días y 12 horas y los 18 días y 22 horas. Vale la pena señalar que el tiempo cronológico no siempre coincide con el tiempo biológico y fisiológico de las aves, y cada ave puede tener su propio ritmo. Por lo tanto, la ventana de aplicación es corta y requiere una atención constante.
En cuanto a la aplicación por spray, las vacunas y los probióticos pueden administrarse simultáneamente utilizando una máquina pulverizadora. Este proceso es relativamente sencillo y fácil de llevar a cabo, pero requiere un cuidado especial para garantizar una colonización temprana eficaz. Para cada caja que contenga 100 pollitos, el volumen aplicado debe variar entre 15 y 21 ml de la solución de vacuna/probiótico. Aplicar la solución mediante pulverización de gota gruesa (alrededor de 200 micras), asegurándose de que la distribución sea uniforme y cubra toda la superficie de la caja. La adición de colorante también despierta el interés de las aves, fomentando el consumo de las gotas con probióticos, y facilita la evaluación de la calidad de la aplicación. Aproximadamente el 95% de los pollitos deben tener la lengua coloreada, lo que indica que han ingerido la solución aplicada.
Por lo tanto, la aplicación más eficaz del probiótico en spray en la planta de incubación es aquella que equilibra los siguientes puntos:
Consideraciones finales…
La producción avícola es uno de los sectores con uno de los mejores índices de eficiencia a la hora de convertir el grano en alimentos de alto valor biológico y menor huella de carbono e hídrica. Mantener una alta eficiencia alimentaria es esencial para que el sector avícola cumpla con la creciente demanda de proteína animal, pero también representa un reto importante, ya que la producción avícola intensiva puede verse afectada por enfermedades infecciosas, algunas de las cuales son zoonóticas. Si la microbiota intestinal es crucial para la salud de las aves, la colonización temprana se convierte en uno de los principales puntos de partida para una producción avícola sostenible.
![Colonización temprana: punto de partida para una producción avícola segura | Biocamp Paulo Martins](https://biocamp.com.br/wp-content/uploads/2023/11/10.png)
Autor: Paulo Martins
Director Técnico – Biocamp