Trazabilidad: comprenda la importancia de la producción de probióticos

Ivan Lee, Director Industrial y Comercial de Biocamp.

Esta afirmación del Director Industrial y Comercial de Biocamp, Ivan Lee, destaca la importancia de la trazabilidad en los procesos productivos industriales.

Seguir el camino recorrido por una materia prima, desde su origen hasta su llegada a la industria, conocer los procesos e infraestructura involucrados en la producción e incluso mapear los detalles respecto a su distribución son pasos fundamentales para el mantenimiento de los estándares de calidad y adecuación a las normas reglamentarias.

Pero es más que eso: demuestra que la compañía está en línea con el momento actual en el que los clientes son cada vez más exigentes en cuanto al origen de lo que consumen y utilizan.

Después de todo, la trazabilidad permite ampliar el nivel de entrega al mercado, lo que permite una mayor calidad de cada producto fabricado y la satisfacción de las demandas de los clientes. Y eso se aplica a todos los entornos industriales, incluso para el desarrollo de los probióticos aplicados en la avicultura.

En este contenido, mostraremos cómo se aplica la trazabilidad en el universo de la producción de probióticos y cuáles son los diferenciales del proceso de producción de Biocamp.

Qué criterios considerar en el proceso de producción de probióticos

Los probióticos son microorganismos vivos, de una o más especies, que actúan en el organismo de las aves con el fin de promover el incremento de bacterias beneficiosas y, al mismo tiempo, reducir la presencia de bacterias patógenas.

Para que puedan cumplir su función y ser realmente efectivos para aumentar el rendimiento, la salud y la productividad de la parvada, estos microorganismos deben tener buena adherencia a las células intestinales de las aves, capacidad de multiplicación e inhibición de patógenos.

También es determinante la calidad de las materias primas utilizadas, lo que requiere atención desde la planificación de lo que se producirá, la cuantificación de lo que se comprará y la calificación de los proveedores hasta la calificación de las materias primas. Y el seguimiento de todos los insumos del proceso de producción es la forma de garantizar que esa calidad se mantenga hasta el uso efectivo del producto por parte de las empresas del segmento de corte y postura comercial.

En la práctica, esto sucede con el diálogo entre algunos sectores importantes para la gestión de procesos, como Aseguramiento de Calidad, Compras y Control de Calidad. En Biocamp son ellos quienes se encargan de toda la documentación, verificación y ensayos realizados con las materias primas que utilizamos en nuestros probióticos. La integración de este proceso es posible a través de un sistema informático que comienza con la planificación, pasa por los procesos intermedios y llega al certificado de análisis que certifica que estamos correctamente clasificados.

Pero cuando hablamos de trazabilidad, todavía hay otros elementos que son igualmente importantes para ser monitoreados en la cadena de producción y que no involucran solo a las materias primas. Estamos hablando de:

• Mantenimiento preventivo y correctivo de los equipos utilizados en el proceso;
• Control de limpieza de ambientes e instrumentos utilizados;
• Calibración y validación de equipos;
• Registro de trámites realizados en formularios específicos;
• Control de semillas bacterianas almacenadas, secuenciación genética, pureza (ausencia de patógenos), titulación, etc.
• Definición y seguimiento de parámetros de producción (químicos, físicos y biológicos);
• Entrenamiento y seguimiento de los profesionales para que estén cualificados para el desempeño de la función.

“Quien no controla, no mide. Tener control sobre los procesos y productos es fundamental para garantizar la trazabilidad. En otras palabras, tener mapeo e historial desde la llegada de la materia prima hasta el producto final, asegurando una estandarización de procesos y productos y buscando siempre la calidad e inocuidad de nuestros productos”, concluye Iván.

Biocamp: diferenciales en su cadena productiva

Considerando la importancia de la trazabilidad, Biocamp adopta una serie de medidas encaminadas a optimizar y mejorar sus procesos internos. Realizamos consulta de documentos desde la certificación de proveedores, incluso en la planificación de compras, hasta la llegada de materias primas. Esta documentación registra cada proceso, paso y parámetros con el fin de controlar y evidenciar la gestión de riesgos y las Buenas Prácticas de Fabricación (BPF).

También realizamos muestreo y análisis de contaminantes, así como pruebas de eficiencia de algunos insumos. Estos ensayos microbiológicos, bioquímicos y moleculares se realizan no solo en todas las etapas de producción, sino también durante el período de vigencia de los productos, con las muestras que se almacenan en condiciones de humedad y temperatura controladas, que cumplen con la legislación vigente.

Es uno de los diferenciales de Biocamp probar la calidad del lote y evitar eventuales fallas. Y todo eso se lleva a cabo en modernas instalaciones clasificadas por las normas brasileñas e internacionales, con un sistema de bioseguridad que garantiza la pureza de nuestros productos.

Biocamp ha estado invirtiendo durante años en tecnología de punta para satisfacer las demandas de los clientes y ofrecer excelentes soluciones para el mercado avícola. Todos nuestros profesionales están comprometidos, capacitados y equipados para acompañar toda la cadena de producción de probióticos y asegurar su eficiencia.

Por eso estamos en condiciones de atender los mercados más exigentes, tanto en Brasil como en el exterior. ¡Aprenda más sobre nuestro moderno laboratorio de Investigación y Desarrollo (I + D) y hable con uno de nuestros consultores para conocer el portafolio de probióticos de Biocamp!

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